Sólo dos juegos al año: nuevo reporte revela que los gamers han reducido drásticamente sus compras
Un estudio reciente liderado por GameDiscoverCo y presentado por el analista Mat Piscatella revela que gran parte de los jugadores consumen apenas uno o dos juegos nuevos por año. Esta cifra contrasta con la percepción de que los gamers compran múltiples títulos cada mes. El trabajo pone de relieve cómo el comportamiento de compra en la comunidad se ha vuelto mucho más conservador, motivado por factores económicos, saturación de catálogos y modelos alternativos como suscripciones.
Qué revela el reporte: cifras, tendencias y causas
Datos principales
Un 33 % de los encuestados admitió adquirir uno o dos juegos al año.
Sólo un 10 % dijo comprar un juego cada mes, mientras que el 4 % confirma que adquiere más de un título mensual.
Esa tendencia indica que el gamer “promedio” ya no está en constante búsqueda de lanzamientos nuevos, sino que prioriza calidad, ofertas o espera un motivo contundente para gastar.
Factores que influyen en el cambio
Situación económica global
Muchos jugadores señalan que los precios de videojuegos, hardware y suscripciones han subido, y que ya no está tan fácil dedicar montos grandes al ocio digital. Algunos pasan más tiempo revisando ofertas o descuentos antes de comprar.Acumulación de títulos sin jugar
Un fenómeno que acompaña a este reporte es el “backlog”: los jugadores tienen bibliotecas amplias con juegos comprados que no llegan a jugarse nunca. Por lo tanto, la presión por comprar más se reduce, ya que la cantidad de juegos disponibles, incluso sin estrenar, es alta.Modelos de suscripción
Servicios como Game Pass, PlayStation Plus, catálogos digitales y plataformas en la nube ofrecen acceso a varios títulos sin tener que comprarlos directamente, lo que puede disminuir la necesidad de compras individuales frecuentes.Preferencia por títulos grandes o franquicias consolidadas
En muchos casos los jugadores reservan su gasto para los juegos que saben que serán populares, de franquicias anuuales o muy esperados, como Call of Duty, EA Sports FC, etc., dejando de lado lanzamientos más pequeños o menos promocionados.
Consecuencias para la industria
Las editoras podrían tener que ajustar sus estrategias de publicación, enfocándose más en calidad, marketing agresivo y fechas de lanzamiento que generen expectación.
Los descuentos, bundles y ofertas promocionales podrían ganar importancia como claves para incentivar ventas, dado que muchos jugadores sólo compran cuando perciben valor claro.
Los modelos de suscripción y de acceso a biblioteca podrían seguir creciendo como alternativa al modelo de compra tradicional.
Podría aumentar la presión sobre los precios de lanzamiento y la necesidad de ofrecer contenido adicional (DLCs, expansiones, etc.) que prolongue la vida útil de un título.

