Infantino pide “mente abierta” para reconsiderar las fechas de los Mundiales tras 2030

Durante la Asamblea General de clubes europeos celebrada en Roma, Gianni Infantino, presidente de la FIFA, hizo un llamado a replantear cuándo se disputan los próximos Mundiales, sugiriendo que ya no es viable mantenerlos en los tradicionales meses de junio y julio. Su propuesta apunta a considerar alternativas como marzo u octubre para encarar los crecientes desafíos climáticos y logísticos globales.

Aunque el calendario internacional está establecido hasta 2030, Infantino señaló que el Mundial de 2034 en Arabia Saudita podría ser una oportunidad ideal para aplicar esos ajustes. En su intervención, enfatizó que no se trata de cambiar únicamente ese torneo, sino de reflexionar en forma global sobre la sostenibilidad del calendario futbolístico.

“No se trata solo de un Mundial, es una reflexión general. Incluso jugar en algunos países europeos en julio hace muchísimo calor, así que quizás tengamos que pensar.”

Infantino también advirtió que cambiar fechas no es una decisión sencilla: diciembre no funciona igual en todos los hemisferios, y julio puede ser inviable en muchos territorios. Por ello afirmó que marzo y octubre podrían ofrecer una ventana más equilibrada para disputar la Copa del Mundo simultáneamente en distintas regiones.

La postura del dirigente responde a una creciente preocupación sobre el impacto del clima extremo en la salud de los jugadores, especialmente en estadios ubicados en regiones con temperaturas elevadas. El antecedente más claro ocurrió en el Mundial de 2022 en Catar, que debió jugarse en noviembre y diciembre por el calor extremo que representaba ese calendario tradicional.

Sin embargo, al menos por ahora, los Mundiales pactados hasta 2030 continuarán según lo planeado. Cualquier cambio importante empezaría a aplicarse en ediciones posteriores, específicamente desde 2034 en adelante, si es que se aprueba un nuevo modelo de programación.